Existen muchos factores que pueden afectar la rapidez de nuestro equipo, cuando trabajamos con Windows 10 algunos de ellos pueden ser solucionados, pero otros no y hoy te daremos algunos trucos muy útiles que te permitirán acelerar el inicio de este sistema operativo.
Ciertamente la capacidad de memoria y la velocidad de tu equipo son factores muy importantes, pero antes de tomar algunas decisiones drásticas, te aconsejamos que pruebes con los siguientes trucos:
- Activa el inicio rápido del sistema operativo, esta es una opción especial que te puede ser de gran ayuda para acelerar este proceso en Windows 10, si lo quieres hacer puedes encontrar esta opción en el panel de control, dentro de las opciones de Hardware y sonido – Opciones de energía. Allí solo debes seleccionar sobre la opción “Elegir comportamiento de los botones de inicio/apagado” , al seleccionar allí podrás elegir la opción de “Activar el inicio rápido(Recomendado)” .
- Desactiva los programas de inicio de Windows 10, para lo cual deberás abrir el Administrador de tareas, a través del clic derecho sobre la barra de tareas o presionando la combinación de teclas “Ctrl + Shift + Esc”, un vez allí busca la pestaña Inicio y verás todos los programas que se cargan cuando inicias tu equipo con Windows 10. Si ves alguno que no te interesa entonces haz clic en su entrada con el botón derecho y selecciona “Deshabilitar”.
- También puedes utilizar una herramienta de terceros para así controlar el inicio del sistema operativo, algunas de ellas son una excelente manera y son gratuitas, como por ejemplo: Glarysoft Startup Manager, Argente Autorun y Starter .
- Otro cosa que debes tener en cuenta para evitar que tu equipo se ralentice cuando lo estés iniciando es evitar que las aplicaciones se ejecuten en segundo plano, esto no solo afecta el inicio del sistema operativo, sino la carga del sistema en general cuando está en funcionamiento, así que accede de la siguiente manera y fíjate si hay alguna aplicación ejecutándose en segundo plano de la siguiente manera: accede al Menú de Inicio, haz clic en “Configuración”, luego en “Privacidad” y finalmente clica en “Aplicaciones en segundo plano”. Allí puedes desmarcar aquellas aplicaciones de manera individual o bien puedes desmarcar el botón general, para así no permitir ninguna.
- Evita la pantalla de bloqueo cuando inicia Windows 10, esto te permitirá que el inicio pase por menos etapas y todo será mucho más rápido, para ello accede al CMD o al símbolo del sistema dónde escribirás netplwiz, se abrirá un cuadro de diálogo de las Cuentas de usuario. Selecciona el usuario que estas usando y desmarca “Los usuarios deben introducir un nombre de usuario y contraseña para usar este equipo”.
- Desactiva el tiempo de retraso de inicio de los programas, con este truco permites que se carguen ciertos procesos en primer lugar. Abre el menú de inicio y escribe “regedit” , también puedes utilizar Cortana. Esto te abrirá el Editor de Registro y allí debes tener mucho cuidado, así que te recomendamos crea una copia de seguridad para hacer este truco, así mismo debes tener un poco de conocimientos sobre la modificación del sistema operativo y si no los tienes es mejor que busques ayuda.
Esta son las opciones más sencillas y menos drásticas que debes probar antes de tomar otras medidas, en donde tendrás indudablemente que realizar una inversión, estamos hablando de tal vez un cambio de disco duro de uno mecánico a otro más moderno que ofrezca mucha más velocidad, pero antes de esto, si tu ordenador está demasiado lento y está colmando tu paciencia, intenta estos trucos seguro te serán de mucha ayuda.